En noviembre del año pasado, la superestrella de la canción colombiana Shakira llegó a un acuerdo con las autoridades españolas y el fiscal que le permitió evitar la cárcel en un caso de fraude fiscal. Ahora, unos seis meses después, parece que se puede archivar un segundo caso en su contra.
Fuentes judiciales de Barcelona dijeron hoy a la agencia Efe que el fiscal ha solicitado por escrito al juez encargado del caso que desestime los cargos, que acusaban al hombre de 47 años de haber eludido el pago de 6,6 millones de euros en impuestos en 2018 a la Agencia Tributaria Española.
Las acusaciones originales de la fiscal afirmaban que se había aprovechado de una red de empresas, entre ellas una ubicada en Luxemburgo, para evitar pagar lo que debía.
La fiscal afirmó que había presentado declaraciones inexactas del impuesto sobre la renta, en las que no declaraba ganancias, además de deducir costos indebidos, reduciendo así su carga tributaria.
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Pero ahora el fiscal ha descubierto que no hay pruebas suficientes que demuestren que defraudó más de 6 millones de euros, durante un año en el que todavía residía en Barcelona con su ahora expareja, Gerard Piqué, y sus dos hijos pequeños.
Es probable que el expediente sea archivado judicialmente y ahora se resuelva directamente con la Agencia Tributaria, que podrá reclamar los pagos pendientes en caso de que los hubiera.
Este segundo caso salió a la luz el pasado verano, mientras el equipo legal de Shakira se encontraba en plenas negociaciones para resolver el primero.
En noviembre, tras un largo proceso judicial, aceptó pagar una multa de 7,8 millones de euros tras llegar a un acuerdo con el fiscal de Barcelona y con la Agencia Tributaria por haber evadido 14,5 millones de euros entre 2012 y 2014.
El caso se originó porque Shakira había afirmado que durante ese tiempo no era residente fiscal en España, y por tanto no tenía obligaciones.
Ella siempre ha negado haber actuado mal, pero finalmente aceptó un trato.
El acuerdo significaba que no enfrentaría pena de cárcel, sino que se le impondría una sentencia suspendida de tres años y la multa antes mencionada, en lugar de los más de ocho años de prisión y la multa de 23,8 millones de euros que esperaba originalmente.
Una vez que el segundo caso sea oficialmente archivado, los problemas legales que Shakira enfrenta desde hace años en España finalmente terminarán.
La cantante ahora vive en Miami con sus dos hijos, luego de que llegara a un acuerdo con la ex estrella del fútbol del FC Barcelona Gerard Piqué por su separación.
