El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ha declarado ante la jueza que le investiga por el caso Brodie que “jamás ha habido licitaciones irregulares” durante su mandato en el ente federativo.
Rubiales, que ha llegado al Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda a las 9.31 horas, ha prestado declaración durante unas cinco horas por una investigación por administración desleal y corrupción en los negocios.
La jueza ha impuesto dos medidas cautelares a Rubiales, que tendrá que acudir al juzgado una vez al mes o cuando la justicia lo considere, aunque la Fiscalía solicitó que se personase cada 15 días; y en caso de que quiera viajar al extranjero, deberá notificar su salida y pedir permiso, así como informar de la duración del viaje e indicar el domicilio en el que permanezca.
ha negado las irregularidades que le atribuye la Fiscalía en el procedimiento que se sigue en su contra por presuntos delitos de corrupción en los negocios y administración desleal, según las fuentes consultadas. También ha reconocido conocer al resto de investigados en la causa.
Rubiales ha sostenido que el contrato de la Supercopa con Arabia Saudí se tradujo en “dinero para los clubes”, y ha asegurado que la Federación no pagó ninguna comisión a Kosmos, empresa del exjugador Gerard Piqué, por la “intermediación” con la empresa saudí Sela y que la oferta de esta sociedad fue la mejor, según las fuentes.
Asimismo, el de Motril ha defendido la contratación de Gruconsa, empresa que realizó las obras del estadio sevillano de La Cartuja. Se eligió, ha defendido, porque tenía los informes, la competencia y la experiencia para hacer el trabajo en 30 días, según las fuentes. “O lo hacíamos así o perdíamos la sede”, ha aseverado Rubiales, que ha añadido que los técnicos le dijeron que era la única empresa que podía hacerlo.
En la causa, que se abrió en 2022 a raíz de la denuncia de Miguel Ángel Galán, se investigan varios asuntos. El principal es el contrato por el que se trasladó la Supercopa de España a Arabia Saudí y por el que Gerard Piqué cobró 24 millones de euros en comisiones, aunque también indaga sobre presuntos desvíos de dinero por parte de la RFEF que acabaron en empresas del círculo de Rubiales. En concreto, se investiga la adjudicación de contratos de construcción a la empresa Gruconsa para la remodelación del Estadio de la Cartuja, en Sevilla. De los 3,8 millones destinados a esas obras, 500.000 habrían ido a parar a la sociedad Dismatec, del exfutbolista Francisco Javier Martín Alcaide, conocido como Nene y amigo íntimo de Rubiales. También 48.000 euros al bufete de abogados del cerebro jurídico de la Federación en la época de Rubiales, Tomás González Cueto.