Laboral Kutxa ha alcanzado un hito importante al celebrar sus 65 años de existencia, y lo hace con una firme dedicación hacia la comunidad de Álava. Esta cooperativa de crédito ha estado apoyando diversas iniciativas sociales, demostrando que le importa más que solo el negocio. A través de sus oficinas y con la ayuda de sus socios cooperativistas, ha canalizado muchos proyectos que benefician a diferentes grupos de personas en necesidad.
Iniciativas locales que marcan una diferencia
Entre las acciones más destacadas de Laboral Kutxa, encontramos su contribución a Cáritas, donde donó 3.039€ tras la Marcha Green que se celebró el 22 de septiembre. Esta recaudación fue fundamental para ayudar a las familias afectadas por conflictos bélicos. Además, la cooperativa no solo se enfoca en donaciones económicas, sino que también juega un papel activo en la vida cultural de la región.
Apoyo a eventos y tradiciones
Laboral Kutxa también colabora en fiestas locales como La Blanca, participando con cuadrillas de blusas y neskas, contribuyendo así a mantener vivas las tradiciones vascas. Además, su presencia en el escenario musical es notable, con su participación en el concierto benéfico anual de Jazzargia en el ciclo Ondas de Jazz, lo que refleja su interés no solo en la economía, sino también en la cultura.
Compromiso con la cultura y el lenguaje vasco
La cooperativa también se involucra en la promoción de la cultura vasca y del euskera. Trabaja junto a entidades como Izaskun Arrue Kulturgunea y participa en eventos como Araba Euskaraz. Este compromiso con la lengua y la cultura local es esencial para mantener la identidad vasca, y Laboral Kutxa se posiciona como un actor clave en este ámbito.
Foco en el bienestar de las personas mayores
Una de las iniciativas más conmovedoras fue la donación de cinco triciclos al programa “En Bizi sin Edad” del Ayuntamiento de Vitoria, que está diseñado para ayudar a las personas mayores a mejorar su calidad de vida. Estos triciclos brindan una forma de movilidad y disfrute de actividades al aire libre, demostrando que Laboral Kutxa se preocupa por el bienestar de todos los sectores de la sociedad.
Colaboraciones que fortalecen la comunidad
La cooperativa también ha establecido alianzas con diferentes organizaciones como Korterraza y la Fundación Catedral Santa María, que facilitan actividades culturales y proyecciones cinematográficas. Estas colaboraciones no solo enriquecen la comunidad, sino que también permiten que más personas participen en actividades culturales diversas.
Un legado de generosidad
Laboral Kutxa no es solo una entidad financiera; es un pilar en la comunidad de Álava. Su filosofía de devolver a la sociedad lo que recibe ha guiado sus acciones a lo largo de los años, y este compromiso se evidencia en cada proyecto y colaboración que ha emprendido. La celebración de sus 65 años es solo un recordatorio de cómo una organización puede tener un impacto positivo en la comunidad a través de diversas iniciativas que benefician a las personas en momentos de necesidad.
El futuro está en las manos de todos
Con su enfoque en ayudar a grupos vulnerables, promover la cultura y las tradiciones locales, y apoyar el bienestar de las personas mayores, Laboral Kutxa se muestra como un ejemplo de cómo las empresas pueden ser agentes de cambio. Su legado de generosidad nos invita a todos a reflexionar sobre nuestras propias contribuciones a la comunidad y cómo podemos unirnos para hacer de nuestro entorno un lugar mejor para todos.
